En la solemnidad de la Anunciación del Señor, la presentación en línea del nuevo sitio web www.santuarioloreto.va. «Una casa de comunicación»: así la definió el arzobispo Dal Cin. Para el cardenal Ravasi, la elección de la fecha de hoy es la «celebración de la presencia de Cristo en el seno de María». El Prefecto del Dicasterio para la Comunicación, Paolo Ruffini, también participó en el acto con una reflexión sobre la comunicación de la Iglesia.
(vaticannews.va).-Un sitio Internet que se convierte en una casa para los peregrinos de Loreto, pero también para los que no creen y para los que, en todos los rincones del mundo, buscan el sentido de sus vidas. En pleno Jubileo Lauretano, que el Papa Francisco ha prolongado hasta el 10 de diciembre de 2021, la nueva iniciativa -la presentación de www.santuarioloreto.va- es también una forma de «volar alto», como dice el lema del año especial, una herramienta al servicio de la conversión pastoral. El sitio web se presentará en modo renovado, en 5 idiomas diferentes para la oración, con la posibilidad de encender una vela en la Basílica y enviar intenciones especiales para ser llevadas a la Santa Casa.
De casa a casa
Esta mañana ha tenido lugar la presentación en línea de monseñor Fabio Dal Cin, prelado arzobispo de Loreto, que ha subrayado que no ha sido una elección casual lanzar el nuevo sitio en la solemnidad de la Anunciación del Señor, «el acontecimiento inédito que ha tenido lugar entre los muros de la Santa Casa, en el que se cumple el sí de Dios que se hace casa con la humanidad para salvarla y devolverle la vida, y el sí de María que se hace casa para acoger al Hijo de Dios». «Así, la Casa Santa, como Casa de la Anunciación, podemos considerarla con razón -explicó- también la Casa de la comunicación». Recordando las tres prioridades pastorales indicadas por el Papa en su visita de hace exactamente dos años, la familia, los jóvenes y los enfermos, el Arzobispo explicó la perspectiva internacional del nuevo sitio web que pretende implicar «de Casa en casa» con la misa diaria, con el rezo del Rosario, el Ángelus y el viernes por la tarde el encuentro para las familias y los jóvenes. Una amplia participación posible también gracias a la colaboración con Vatican News – Radio Vaticano y Vatican Media.
Un viaje de renacimiento
El programa prevé iniciativas para los jóvenes a la luz de la Christus vivit, para las familias en el año de la Familia Amoris laetitia -más de 200 se conectan a los eventos del Santuario-, para los enfermos con atención a las enfermedades raras y finalmente la cultura con el acuerdo firmado con las universidades locales para potenciar el complejo del Santuario que acogerá la exposición dedicada a la «Madonna del Velo» o «de Loreto» pintada por Rafael. «Cuidar la vida interior -dijo monseñor Dal Cin- es el camino más apasionante del que procede todo renacimiento personal y social positivo». Por último, el recuerdo de Dante en el 700 aniversario de su muerte, que supo interpretar el tema de la peregrinación terrenal y que culmina en el último canto del Paraíso con la oración a la Virgen. Las palabras – «Mujer, eres tan grande y tanto vales, que quien quiere la gracia y no recurre a ti, quiere volar sin alas»- resurgieron en la restauración del interior de la cúpula de la Basílica.
Ravasi: peregrinación, testimonio de fe
En un vídeomensaje, el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo Pontificio de la Cultura, relató su experiencia personal como peregrino en Loreto. Recordó a los artistas -Bramante, Sangallo- que quedaron impresionados por la Casa, así como a Cartesio y Mozart. «La fecha en la que comienza este sitio web es el 25 de marzo, el día de la Anunciación, el día -subrayó Ravasi- en el que se celebra precisamente la presencia, la primera presencia física de Cristo, de Cristo hombre en el seno de María, en una maternidad». «El misterio central del cristianismo» que se recuerda en la Basílica y que también recuerda a Dante. El presidente del Consejo Pontificio de la Cultura se detuvo a continuación en el significado de la peregrinación, etapa fundamental y presente en todas las religiones, como «uno de los grandes testimonios de la fe», «una parábola casi de la vida». «Y es por ello que la peregrinación a Loreto, cuando la pandemia quizás se extinga, estará marcado por el flujo de peregrinos pero también ahora a través del instrumento de internet, del sitio que permite casi como ocurría en la tradición simbólica a la casa de Loreto atravesar los cielos y llegar al interior de su propia casa».
Ruffini: comunicar es cercanía
También estuvo en Loreto el Prefecto del Dicasterio para la Comunicación, Paolo Ruffini, que en su discurso recordó las palabras del Papa sobre María «influencer de Dios» que «con su sí ha influenciado la historia de la humanidad, nuestra historia». Una historia que hay que llevar adelante frente a las cifras: «la mitad de los habitantes del planeta están conectados a Internet, 4.000 millones son los que utilizan regularmente las redes sociales. Sólo el año pasado, según la investigación más reciente, en todo el mundo, sumando el tiempo que pasa cada usuario en la red, llegamos a casi mil millones y medio de años en línea». En Italia hay más o menos 50 millones de italianos conectados cada día, 35 millones con un perfil social, 80 millones de smartphones en uso en una población de unos 60 millones.
El sí dinámico de María
El Prefecto explicó que son números que entusiasman y asustan, pero que llaman a la Iglesia a una presencia hecha de bondad, testimonio del Evangelio y proximidad. «Un nuevo protagonismo cristiano, en la sociedad italiana, es absolutamente necesario para leer y gobernar los cambios que nos esperan». Un camino que lleva a «comunidades activas y participadas, ofreciendo una luz, una esperanza». «Compartir es la palabra clave», es «estar con», una conexión acompañada de un verdadero encuentro, en una relación en la que los medios de comunicación pueden jugar un papel importante. Comunicar con la verdad, con todo nuestro ser para anular las distancias, comunicando también la belleza en un espíritu de colaboración. Es necesario volver a empezar -añadió el prefecto- desde el sí dinámico de María, para ser «portadores de una promesa». «Aquí está la respuesta de por qué no podemos no estar en las redes sociales también para llevar a las personas a la verdad del encuentro. Para reconstruir la unidad también de la Iglesia. Para hacer visible que realmente somos miembros unos de otros».