Con motivo de laShaping Tomorrow, la conferencia de comunicación de los salesianos 2024, en Roma del 1 al 7 de agosto de 2024, compartimos en las redes sociales la reflexión SDB de Maciej Makula. El presidente de WeCa, Fabio Billetta, hablará en la conferencia como orador.
Introducción
(www.weca.it).-En la última década, las redes sociales se han convertido en islas de evangelismo, donde cada vez florecen más iniciativas. A su vez, las nuevas tecnologías están allanando el camino para formas innovadoras de comunicación y ayudando a influir en la evangelización en aguas desconocidas. Las generaciones más jóvenes de niños y jóvenes se están familiarizando naturalmente con las posibilidades que ofrece la comunicación digital y se convierten en protagonistas de acciones concretas. El Papa Francisco, en su exhortación apostólica postsinodal Christus Vivit, dirigida a los jóvenes y a todo el pueblo de Dios, anima también a las nuevas generaciones a mirar a la Iglesia con nuevos ojos y a ser valientes en sus acciones.
Los jóvenes de la Generación Z y Alfa se están convirtiendo en la fuerza impulsora detrás de los esfuerzos de evangelización de la Iglesia. Al adquirir experiencia, una cultura mediática relevante y aprender principios éticos, están llevando a la Iglesia a areópagos hasta ahora desconocidos. Lanzan sus redes evangélicas y se acercan a los habitantes del «continente digital» con un ingenio a menudo imaginativo, para «vivir en medio del mundo y de la sociedad para evangelizar sus diversas exigencias, para aumentar la paz, la convivencia, la justicia, los derechos humanos, la misericordia, y así extender el Reino de Dios en el mundo»[1]. Con la ayuda de educadores experimentados, teóricos de los medios de comunicación y profesionales, están construyendo los cimientos de nuevas formas de evangelismo en línea.
Descubrir los signos de los tiempos, crear herramientas y lanzar proyectos con los jóvenes en el campo de los medios de comunicación se está convirtiendo en un desafío urgente para la Iglesia del siglo XXI. Las redes sociales fermentan como levadura para la acción pastoral e incluso para el anuncio del kerigma. De ahí la importancia de una formación adecuada, de trabajar en red con jóvenes de todo el mundo y de evangelizar con los jóvenes en línea. El siguiente artículo, a partir de la exhortación Christus Vivit, presentará algunas reflexiones sobre la enseñanza de la Iglesia sobre la participación de los jóvenes en los proyectos mediáticos: «[…] ya que se mueven tan bien en las redes sociales, es necesario involucrarlos para que los llenen de Dios, de fraternidad, de compromiso» [2].
Entorno digital
La exhortación Christus Vivit, en los números 86-90, presenta el entorno digital como un rasgo indispensable del mundo contemporáneo. La cultura se está «informatizando» cada vez más, las formas de comunicación están cambiando, el mundo digital está digitalizando la cultura, a veces dificultando el establecimiento y desarrollo de relaciones interpersonales, que incluso pueden adoptar una forma inhumana que deprecia la dignidad humana (pornografía, noticias falsas, dark web, ciberacoso). Sin embargo, Internet se ha convertido en un lugar de presencia cotidiana para millones de jóvenes, que a veces consideran el contacto virtual como la única comunicación adecuada y saludable. Por lo tanto, las generaciones más jóvenes se enfrentan al desafío de las interacciones maduras en el mundo real y virtual [3].
El mundo digital puede ser peligroso, puede engañarte lanzándote a las aguas de la soledad o el aislamiento emocional. Sin embargo, están naciendo jóvenes «que también son creativos y a veces brillantes en estos ámbitos. Como, por ejemplo, el joven venerable Carlos Acutis» [4]. Este joven de la Iglesia Católica ha entendido los mecanismos de comunicación en Internet; Era consciente de los peligros, no caía en las trampas y, al mismo tiempo, utilizaba sus peculiares habilidades y las nuevas tecnologías para la evangelización con perfecta precisión y perspicacia [5]. En lo que respecta a las innovaciones en el mundo digital, la llamada inteligencia artificial, es decir, un sistema informático programado avanzado que intenta igualar la inteligencia humana mediante la realización de diversas tareas, se ha vuelto inmensamente popular recientemente. El conocido ChatGPT, diseñado por OpenAI, es una herramienta que implementa la inteligencia artificial, y su misión es beneficiar a toda la humanidad [6].
El anuncio del Evangelio en las diversas areópagos digitales presupone un diálogo con la cultura. «La evangelización requiere un interés concreto por el mundo de los medios de comunicación, que son el camino en el que, especialmente en los nuevos medios, nos encontramos con muchas personas, con sus muchas preguntas y con sus muchas expectativas» [7]. Por otro lado, la cultura digital actual puede provocar un sentimiento de orfandad y «debemos aceptar que toda la sabiduría que necesitamos para la vida no puede estar encerrada dentro de los límites impuestos por los recursos actuales de comunicación» [8]. La cultura digital, que conduce a la transformación cultural, está teniendo un profundo impacto en nuestra capacidad de comunicarnos, aprender y establecer relaciones, y las nuevas tecnologías y el desarrollo de Internet están cambiando la forma en que abordamos la evangelización en la Iglesia. «Estamos viviendo un cambio de época: una metamorfosis no solo cultural sino también antropológica que genera nuevos lenguajes (…)» [9].
Evangelismo Digital
Hace muchos años, en 1976, el Papa Pablo VI escribió proféticamente sobre los medios de la nueva evangelización: «Este problema del ‘cómo evangelizar’ sigue siendo siempre actual, porque los caminos varían según las circunstancias del tiempo, del lugar, de la cultura y, por tanto, plantean un cierto desafío a nuestra capacidad de descubrimiento y adaptación»[10]. A su vez, el Papa Juan Pablo II vio claramente que el desarrollo de los medios de comunicación traería nuevas oportunidades para la evangelización: «Para la Iglesia, el nuevo mundo del ciberespacio exige la gran aventura de utilizar sus posibilidades para proclamar el mensaje evangélico» [11]. El Papa Benedicto XVI también fue consciente de la importancia de la generación digital y de las riquezas que aportan las nuevas tecnologías, que son un don para la Iglesia y para el mundo. «A vosotros, jóvenes, que os encontráis casi espontáneamente en sintonía con estos nuevos medios de comunicación, os corresponde en particular la tarea de evangelizar este ‘continente digital’»[12].
En su mensaje para la 48ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales en 2014, el Papa Francisco invitó a los jóvenes en particular a ser audaces en sus esfuerzos de evangelización: «No tengáis miedo de convertiros en ciudadanos del entorno digital. (…) En este contexto, la revolución de los medios de comunicación y de información es un gran y apasionante desafío, que requiere nuevas energías y una nueva imaginación para transmitir a los demás la belleza de Dios»[13]. A su vez, en la introducción del libro ‘La Iglesia en el mundo digital. Herramientas y propuestas», escribió Francisco que los jóvenes tienen un papel especial que desempeñar en los nuevos modos de comunicación, y su tarea es convertirse en protagonistas de nuevas formas de comunicación social. «Sabemos que lo virtual nunca podrá reemplazar la belleza de las reuniones cara a cara. Pero el mundo digital está habitado y debe ser habitado por cristianos» [14].
La enseñanza de la Iglesia avala el uso del entorno digital para la evangelización. Así lo confirman numerosos documentos, como los Mensajes para la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que invitan a un compromiso responsable con la nueva evangelización. La revolución tecnológica que se está produciendo ante nuestros ojos requiere compromiso y una nueva perspectiva. Ciertamente, la mejor respuesta a este desafío la pueden dar los jóvenes que, gracias a su ingenio, aportan una gran frescura a la Iglesia[15]. «Realmente hay mucho por hacer para aprender a escuchar; y involucrar y formar a los jóvenes, nativos digitales (…). La web y las redes sociales pueden ser habitadas por quienes dan testimonio de la belleza de la fe cristiana, por quienes proponen historias de fe y de caridad vivida (…)» [16].
Familia Salesiana Digital
La Familia Salesiana, por su naturaleza, está llamada a trabajar con los jóvenes. Los cambios tecnológicos y civilizatorios plantean nuevos interrogantes sobre la presencia del carisma salesiano en el entorno digital y sobre la evangelización en el mundo digital, que desde hace algún tiempo se ha convertido en el entorno natural de los jóvenes. La Familia Salesiana y cada uno de sus miembros tienen muchas predisposiciones únicas para zarpar hacia el continente digital misionero, como hemos podido observar durante años en todos los continentes. Esto se hizo especialmente evidente durante la pandemia, cuando se movilizaron enormes fuerzas salesianas para llegar a los jóvenes digitalmente. Muchas instituciones salesianas han tenido actividades profesionales que presentar en este sentido, que han tenido y tienen resultados tangibles.
En cuanto a la participación de la Familia Salesiana en las actividades educativas, informativas y de evangelización en los medios de comunicación tradicionales y sociales, cabe mencionar lo siguiente: las estaciones de radio y televisión salesianas, las revistas y boletines informativos, el Boletín Salesiano, el enorme compromiso de los medios de comunicación durante el período de pandemia, las transmisiones en línea , marketing de influencers, profesionalización de contenidos, portavoces preparados para muchas instituciones, gestión profesional de crisis de comunicación, gestión hábil de la información institucional interna y externa, aumento de la concienciación sobre estudios, formaciones y cursos sobre medios y comunicación, organización de simposios y conferencias relacionadas con nuevas tendencias como el desarrollo de la inteligencia artificial, el metaverso o el live streaming. Además, hay cursos de formación sobre los riesgos de las redes sociales: ciberacoso, noticias falsas, deep fake, patostreaming, ciberacoso, tabnabbing, exclusión digital, phishing, vishing, smishing, estafa, FOMO, flaming, trolling, discurso de odio, sexting, sextorsión, acoso, child grooming, virus informáticos, spam, botnets y muchos otros.
A veces, la falta de una comprensión adecuada de la enseñanza de la Iglesia en los medios de comunicación y la falta de motivación para trabajar ampliamente con los jóvenes en la creación e implementación de proyectos salesianos de medios de comunicación pueden ser problemáticas. Las generaciones comunicativas, especialmente la Generación Y, la Generación Z y la Generación Alfa, están determinando hoy la forma de comunicación interpersonal y corporativa, así como la de la Iglesia. Vale la pena recordar que la llamada comunicación mediada, mientras se utilizan las redes sociales, no es una comunicación cara a cara, en vivo, sino que es una forma de comunicación interpersonal que es lo más normal y adecuada posible. Comprender los procesos contemporáneos de comunicación y evangelización en el mundo digital requiere preparación, estudio, estrategia, prudencia, trabajo en red, compromiso de recursos humanos y financieros y, sobre todo, un adecuado discernimiento espiritual.
Conclusión
El Papa Francisco confía en los jóvenes en lo que respecta al aspecto de la evangelización en las redes sociales. Pide sólo estimular sus aspiraciones, su entusiasmo y sus iniciativas en este campo, porque las redes sociales pueden convertirse en un lugar para el anuncio del kerigma y un renovado deseo de experimentar al Dios personal[17]. El Papa anima a los jóvenes a crear activamente el futuro con valentía: «¡Por favor, no dejéis que los demás sean protagonistas del cambio! ¡Vosotros sois los que tenéis el futuro! A través de ti, el futuro entra en el mundo. Os pido también a vosotros que seáis protagonistas de este cambio» [18].
Los jóvenes evangelizadores llegan a creyentes y no creyentes con el mensaje del Evangelio a través de su entusiasmo[19]. Por supuesto, las propuestas evangélicas en las redes sociales deben usarse con cuidado y cautela, pero dejarse llevar por el miedo no es compatible con la alegre noticia del Evangelio. Por eso Francisco se dirige a menudo a los jóvenes: «No tengáis miedo de ir y llevar a Cristo a todos los ambientes, incluso a las periferias existenciales (…) Y quiere a vosotros, jóvenes, como sus instrumentos para irradiar luz y esperanza, porque quiere contar con vuestra valentía, con vuestra frescura y con vuestro entusiasmo»[20].
El continente digital es hoy el área misionera más grande. El Papa Benedicto XVI ha alentado la evangelización de este continente digital [21]. Los estudios sociológicos y estadísticos muestran que el entorno natural de los jóvenes hoy en día son las redes sociales, y es allí donde los jóvenes pasan la mayor parte de su tiempo. Las nuevas tecnologías son una propuesta interesante para la Iglesia universal y, utilizadas adecuadamente, pueden llegar al corazón de los fieles con el mensaje del Evangelio. Por último, vale la pena recordar las palabras de Juan Pablo II, que vio en las nuevas tecnologías inventos dados por Dios al hombre. Por lo tanto, las palabras: «¡No tengáis miedo! ¡No tengas miedo a las nuevas tecnologías!» [22] son particularmente relevantes en la actualidad.