Las jornadas, en curso en Bogotá del 29 al 31 de julio, reúnen a los comunicadores y periodistas de las conferencias episcopales y otros organismos eclesiales de toda la región.
(aica.org).-«La comunicación en la Iglesia latinoamericana y caribeña»; «Comunicación e Inteligencia Artificial»; «De los influencers a los misioneros digitales»; y «La escucha en entornos digitales: gestión de la reputación y prevención de crisis», son algunos de los temas que vienen abordando los comunicadores de las conferencias episcopales y demás organismos eclesiales de América Latina y el Caribe, reunidos en Bogotá del 29 al 31 de julio, en un encuentro promovido por el Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam).
Tal como precisó el Celam, el objetivo del encuentro ha sido fortalecer los lazos de fraternidad entre los presentes, desde los postulados de la «cultura del encuentro» y la escucha mutua; como así también, trabajar en la elaboración de un diagnóstico de estructuras, capacidades, necesidades y recursos comunicativos, con los que cuenta la Iglesia en América Latina y el Caribe.
Entre las personalidades y expertos en comunicación que participaron de las jornadas, estuvieron monseñor Lucio Adrián Ruiz, secretario para el Dicasterio de la Comunicación del Vaticano; Albertina Navas, doctora en Comunicación, MBA y periodista, asesora senior en comunicación estratégica y marketing digital, con enfoque en gestión de la reputación y crisis.
Los participantes del encuentro compartieron el trabajo que desarrollan en sus países en el campo de las comunicaciones. «Fue una experiencia muy valorada por los asistentes», comentó ADN Celam, agregando que «ese trabajo es muy valioso por lo que de allí se puede aprender, pero también por el sentirse reconocido por los productos que los que asistieron realizan en sus países y que pueden servir para fortalecer otras oficinas de comunicaciones».
Mons. Estrada Herrera: «Hacia un nuevo pentecostés»
El Encuentro de comunicadores comenzó con la misa que presidió monseñor Lizardo Estrada Herrera, secretario general del Celam, quien dio la bienvenida a los 45 participantes, en representación de 16 Conferencias Episcopales y 10 organizaciones eclesiales.
Al inicio del encuentro monseñor Lizardo recordó que uno de los pilares del proceso de renovación del Celam tuvo que ver con la articulación de redes, en clave sinodal, con una visión integradora continental. De ahí que resaltó el papel fundamental de las redes de comunicación de la Iglesia en los procesos de evangelización, de incidencia y de transformación de la realidad.
Igualmente, se refirió a los grandes desafíos que asumió el Celam en esa reestructuración, con la creación del Centro para la Comunicación en 2021, asumiendo un ecosistema innovador de comunicación, en colaboración con instancias eclesiales, sociales e instituciones de incidencia regional e internacional, permitiendo con ello acercarse a un diálogo con las conferencias episcopales, los demás organismos eclesiales y el Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede.
En esa dinámica, el también obispo de Cusco afirmó que, se espera que el reciente encuentro de comunicadores sea un «nuevo pentecostés» para la comunicación de la Iglesia, a partir del compartir y la articulación de servicios y apoyos comunicativos estratégicos, y a la luz del magisterio del Papa Francisco y de la Iglesia latinoamericana y caribeña.
Finalmente, dijo que, al acercarse la segunda sesión de la XVI Asamblea General del Sínodo, a realizarse en octubre en Roma, esperaba que ese espacio de encuentro dé fruto, para fortalecer las acciones comunicativas y lograr una mayor presencia, como una Iglesia más sinodal.
P. Pedro Brassesco: una comunicación que establezca vínculos
Por su parte, el padre Pedro Brassesco, secretario general adjunto del Celam, recordó en su intervención que «la comunicación tiene que tener como base la capacidad de establecer vínculos y relacionarse con los demás». De ahí, que pidió a los participantes preguntarse «qué tipo de vínculo o relaciones estamos estableciendo con colegas entre los diferentes episcopados y movimientos, con los fieles y otras organizaciones, ya que esto, dijo, «es importante tenerlo en cuenta, porque hablamos de profesionalizar siempre la comunicación, pero la profesionalización no debe llevarnos a una comunicación ascética, desencarnada de la realidad de aquellos que buscan vincularse con nosotros o ajena a las situaciones que a veces están viviendo las personas «.
El sacerdote argentino concluyó invitando a todos los participantes a compartir y profundizar en esa materia, para buscar estrategias de trabajo en red, siendo conscientes de que todos somos una sola Iglesia y de todos se puede aprender, para hacerse presente en medio de las realidades de este mundo.
