(exaudi.org).-La Catholic Media Conference (CMC) concluyó sus actividades con aproximadamente 350 asistentes y 24 expositores que pasamos por el Marriott Buckhead & Conference Center de Atlanta para compartir ideas, establecer nuevas relaciones, fomentar la colaboración y compartir mejores prácticas en el ámbito de la comunicación católica.
Organizado por la Catholic Media Association, la conferencia -que reunió en junio a los principales líderes de la industria de la comunicación católica- fue también una oportunidad única para ponerse al día sobre las tendencias del sector y aprender de los expertos en comunicación de la fe católica.
Durante cuatro días, la conversación giró en torno a cómo una comunicación clara y efectiva puede fortalecer la fe y la comunidad. Así como también, se debatió -y bastante- acerca del rol de la tecnología en la modernización de la comunicación católica y cómo las soluciones basadas en la inteligencia artificial pueden construir con este propósito. En ese sentido, el prefecto del Dicasterio para la Comunicación, el Dr. Paolo Ruffini, retomó algunas ideas del mensaje para 58º Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales del Papa Francisco y reflexionó: “El uso de la inteligencia artificial podrá contribuir positivamente en el campo de la comunicación si no anula el papel del periodismo sobre el terreno, sino que, por el contrario, lo respalda».
Viralizar la fe católica
Las nuevas tecnologías son una gran herramienta para acercar el mensaje de la Iglesia a todo el mundo. En ese sentido, el aporte de Alessandro DiSanto, co-fundador de Hallow, hizo sentido por ser uno de los creadores de la exitosa app católica para rezar y meditar.
Si de llegar a la mayor cantidad de católicos se trata, la estrategia de Hallow fue imbatible: en febrero de este año estrenó un aviso en el Superbowl -uno de los mayores escenarios publicitarios del mundo. La publicidad, protagonizada por el actor Mark Wahlberg, animó a los espectadores a unirse a Hallow en oración, logrando el mayor aumento de descargas en su historia.
Pero Mark no es el único de los Wahlberg que trabaja activamente para difundir la fe católica. Su hermano, Jim Wahlberg, ofreció en la Conferencia un testimonio de conversión, resiliencia y superación personal extraordinario que emocionó a todo el auditorio hasta las lágrimas. Lo hizo al presentar “Jesus Thirsts: The Miracle of the Eucharist”, película que él mismo produjo y que dirigió Tim Moriarty. El encuentro de Jim Wahlberg con la Madre Teresa de Calcuta en los años en los que estuvo en prisión lo llevó a encontrarse con Jesús. Y fue esa fe nueva y desbordante la que inspiró esta historia de esta película que tuvimos la oportunidad de ver en la CMC.
Todos necesitamos que alguien nos presente a ese Jesús que renueva nuestra fe. Por eso, la misión es un aspecto central en la vida de la Iglesia y, en este punto, es destacable el trabajo The Pontifical Mission Societies quien participó como sponsor en la Conferencia. Inés San Martín, VP de Marketing y Comunicación de TPMS, aprovechó para agradecer a sus colegas de los medios católicos porque gracias a su labor de difusión “The Pontifical Mission Societies y World Mission Sunday pueden recaudar suficiente dinero, pero sobre todo suficientes oraciones”.
La experiencia hispana
Una de las novedades de la 20º CMC fue que, por primera vez, se organizó un panel dedicado a la necesidad de mejorar, aumentar y hacer efectivo el alcance de los medios de comunicación a la comunidad hispana. Allí el fundador de Juan Diego Network, el mexicano José Manuel de Urquidi, compartió su experiencia al servicio de la comunidad católica hispana y debatió sobre la importancia de conocer y entender a quién le hablamos. Al encabezar el panel “Communicating The Good News”, este joven -que fue uno de los 70 miembros laicos con derecho a voto del Sínodo- dijo: “hay que conocer bien a nuestra audiencia, porque dentro de la comunidad latina hay diferencias, y es importante conocer cómo es cada una para poder establecer una conexión efectiva con nuestro público”.
Ante un panorama mediático en constante expansión en el cual las preferencias de la audiencia católica, -especialmente la de habla hispana- son fundamentales, el análisis de Urquidi no pasa desapercibido. Se estima que hay casi unos 66,5 millones de católicos en Estados Unidos, de los cuales el 47 por ciento son hispanos. En ese sentido, es a ese público a quien tenemos que prestar atención, ya que ahí hay una sólida base de fe sobre la cual se puede edificar el Evangelio.
Un encuentro cara a cara
Hace 12 años cuando fundamos La Machi lo hicimos porque queríamos ayudar a la Iglesia a comunicar mejor. Fuimos pioneros en haber brindado este servicio no solo al Papa y otras instituciones del Vaticano, sino que también lo hacemos para Congregaciones, parroquias y ONG’s dedicadas a asuntos católicos.
Hemos recorrido un largo camino. Y hoy, cuando La Machi acaba de iniciar sus operaciones en Estados Unidos, es un orgullo enorme haber participado como expositores y tener nuestro propio stand en la CMC, el evento en donde estuvieron presentes los líderes de la industria.
En un mundo donde parece que las comunicaciones se han reducido a un rápido y fugaz contacto digital, el encuentro cara a cara resultó fundamental para debatir sobre los desafíos de la comunicación católica.
Desde hace 20 años, la CMC se ha convertido en un encuentro indispensable para quienes buscamos perfeccionar nuestras habilidades, mantenernos al día sobre las tendencias de la industria y aprender de los expertos en comunicación de la fe católica. Sin dudas, la Conferencia es un faro para quienes compartimos la misión de difundir el Evangelio.
Como dijo nuestro querido Papa Francisco, en su mensaje por la 55 Jornada Mundial De Las Comunicaciones Sociales, el desafío que nos espera es el de “comunicar encontrando a las personas donde están y como son”.