(RIIAL) En los últimos años las aplicaciones católicas están creciendo en cantidad y calidad. Hemos entrevistado a Massimo y Bárbara (él informático y ella gráfica), un matrimonio católico que reside en Valencia y que ha desarrollado un set de aplicaciones de contenido religioso y que han concedido una entrevista a la RIIAL.
¿Qué aplicaciones de contenido religioso habéis desarrollado y con qué características?
MaX: De momento hemos desarrollado apps solo para android porque no tenemos suficientes disponibilidades económicas para comprar un Mac y un iphone de última generación, pero nuestras apps estarán listas para iPhone (cuando podré trabajar sobre un Mac).
Las Apps religiosas que hemos desarrollado se pueden ver en este enlace.
App Parroquial
Empezamos con hacer una app para nuestra Parroquia – Iglesia en Villar – a petición de nuestro párroco. En el momento en que escribo, la app de nuestra parroquia cuenta con: Radio y Televisión en directo, que utilizamos para transmitir las misas u otros eventos de la parroquia para quien no pueda acudir (enfermos, de viaje, trabajo…). Todo funciona a través de Internet y no se necesita aparatos especiales… solo dos móviles android de 80€, uno para el canal de la radio y el otro para el video. Los fieles reciben un aviso que el evento está a punto de empezar, lanzan la app, pulsan el botón de Video o de Radio y pueden seguir en directo desde sus móviles estén donde estén. Todos los artículos se envían con una notificación de a la app de la parroquia, así que durante toda la semana la gente recibe uno o dos mensajes al día, pero también recordatorios, o ayudas para reflexionar lo que el Señor nos dice, a través del párroco y también del Papa.
En la app parroquial tenemos también una área de plegaria que comprende liturgia de las horas, evangelio y lecturas del día, muchas oraciones que vamos actualizando según lo que se necesita. Luego nos hemos dado cuenta que el trabajo hecho para nuestra parroquia podía servir para otras y así hemos empezado a desarrollar apps también para otras realidades y apps para ayudar las personas de todo el mundo en orar y conocer más el mundo cristiano-católico.
¿Por qué lo hacen?
Hay todo un mundo por evangelizar, sobre todo en occidente que tiene muchas confusiones, así nos hemos puesto a crear apps más genéricas de forma que cualquier persona pueda usarla sin tener que ser parroquiano de una determinada parroquia.
Con esto han nacido El Santo Rosario, La Biblia de Jerusalén, la app de noticias católicas Mi Iglesia y MyChurch, El Catecismo Católico… y hay otras en desarrollo.
¿Cómo llegaste a la decisión de desarrollar aplicaciones católicas?
Bárbara: Ya era mucho tiempo que sentía la llamada de evangelizar. Me di cuenta que el mundo necesita conocer a Dios sea mediante la oración sea mediante el razonamiento lógico. Es algo que se intuye por el comportamiento de la gente pero no se sabe expresar claramente porque las confusiones de nuestra sociedad nos lo impiden. Conociendo, a través de mi marido, las potencialidad de las aplicaciones, poco a poco me di cuenta que podían ser un poderoso instrumento de evangelización. También el Papa continúa en decir que las nuevas tecnologías son el vehículo más actual para evangelizar. San Pablo predicaba en las plazas; después hemos empezado a evangelizar a través de los libros, luego vino la televisión, internet, correos electrónicos, etc.
Hoy en día las plazas son las plataformas sociales y las aplicaciones; aún si, en mi opinión, las plataformas sociales no consiguen educar al conocimiento de Dios. Muchas veces son plataformas de demasiadas discusiones e enfrentamientos. Yo prefiero las aplicaciones porque a través de ellas se entra en un espacio personal con Dios a través de la oración, la meditación y la información. Algunas personas han comentados que con nuestras aplicaciones son como tener la Iglesia siempre cerca de ti. De hecho, el móvil se ha convertido en una «extensión» de la persona.
MaX: Somos católicos por fe y razonamiento. Durante la crisis económica que azotó España hemos experimentado como la Iglesia Católica nos ha ayudado tanto espiritualmente como materialmente. Yo tengo un plan, donde la creación de las Apps es la primera fase, y que, si Dios quiere, puede hacer avanzar mucho en la evangelización del mundo digital y no solo.
¿En vuestra experiencia como desarrolladores, los usuarios prefieren pagar una aplicación o se conforman con la publicidad?
Barbara: En lo que concierne las aplicaciones cristianas-católica, yo habría preferido no poner publicidades… y veo que mitad de las personas que bajan nuestras apps piensan lo mismo. Pero desarrollar aplicaciones (bien hechas y pensadas para que la persona la use como ayuda, y empuje hacia la oración y al conocimiento de Dios y de la Iglesia), no es «magia». Es un trabajo. No sólo hay que crear el código (que dependiendo de las funciones, puede necesitar meses de desarrollo) sino también las imágenes, el conjunto gráfico, monitorear las aplicaciones para que siempre estén al día, actualizarlas a medida que salen funciones nuevas, y, sobre todo, crear noticias de interés para que las personas se sientan cuidadas, apoyadas y tener la suficiente preparación para decir las cosas correcta, sin modificar ni un pizca el mensaje de la Verdad que la Iglesia Católica guarda y defiende. Cuando la gente sabe todo esto, entonces también entienden porque tenemos que poner publicidades en nuestras aplicaciones. Cobrar por ellas depende de los usuarios. Hemos notados que a los usuarios de android les incomoda pagar mientras que a los usuarios de IOS (IPhone) no… Por lo tanto, supongo que lo mejor sería desarrollar aplicaciones que abarquen ambas partes.
Yo pienso a nuestras aplicaciones como a un apoyo espiritual (en los límites de nuestras posibilidades) para todas las personas de buena voluntad (por lo tanto, no sólo a las cristianas) porque Jesús ha venido al mundo, ha padecido y ha resucitado para todos. Por lo tanto, se necesita una dedicación constante y comprometida que los voluntarios no pueden dar a la Iglesia. En nuestras apps hemos puestos publicidades seleccionadas y lo menos invasivas posibles. Con estas apps, esperamos que la Iglesia en su conjunto entienda que en solo 5 años el idioma de los fieles ha cambiado profundamente. Pero no porque se han incorporado palabras en inglés, sino porque ha cambiado el medio de transporte de las informaciones y es preciso adaptarse para llegar a más personas posibles.
En nuestra experiencia hemos encontrado una muy buena participación para las apps hechas de forma general: El Santo Rosario, MiIglesia, MyChurch, Biblia de Jerusalén, etc. porque ellas no dependen del Párroco sino de las personas singularmente y en cada parte del mundo. Todavía no hemos probado en hacer pagar un alquiler bajito a nuestras aplicaciones. Nos hemos basado directamente sobre publicidades discretas. Cuando decidamos probarlo seréis los primeros en saberlo.
MaX: Generalmente los usuarios occidentales de idiomas latinos (español, italiano, francés, rumano…) no quieren ni pagar ni ver la publicidad, pero la segunda opción se tolera; en cambio los sajones (alemán, inglés, sueco…) prefieren pagar una cantidad mensual o anual y no ver nunca la publicidad.
¿Cómo se mide el exito de un app religiosa o aplicaciones católicas?
MaX: … para mí el éxito está en los comentarios. Esto es lo importante. Claro que no se puede satisfacer a todo el mundo, pero si te llegan casi todos los días comentarios de 5 estrellas felicitándote o proponiendo mejorías… según mi opinión es la mejor forma para ver si una app tiene éxito o no.
Bárbara: En general el éxito se mide del número de usuarios que mantienen la app en el tiempo. Pero los comentarios son muy importantes también. Nosotros estamos muy contentos al ver cómo nuestras apps se están expandiendo en el mundo. Espero que sean de alivio, consuelo y guía para muchas personas porque, realmente, éste mundo necesita a Jesús y a la Virgen María más que nunca y no lo sabe.
¿Cuáles serían los ingredientes para una buena aplicación religiosa?
Bárbara: Bueno, lo importante es, desde luego, los contenidos. Deben estar pensados para guiar la persona hacia el conocimiento de Dios a través de la fe y del razonamiento, al conocimiento de la Iglesia, a la oración, meditación y apoyo espiritual. Si no, la aplicación se queda como un simple folleto recordatorio dejando el tiempo que encuentra. Después está la parte visual que es también importante porque si la aplicación se presenta bien, si las imágenes son las adecuadas, se vuelve más efectiva y da gusto usar el móvil y mirar lo que hay dentro.
La App se convierte en una caja de sorpresas.
Yo a través de la aplicación de MiIglesia y del SantoRosario perpetuo (descargable en PlayStore bajo mRobot.eu) he conseguido rezar mucho más que de costumbre, sea el Rosario sea la Liturgia de las Horas porque en la App sobre todo la Liturgia de las Horas es más cómoda que en el libro.
Las aplicaciones enganchan mucho sea por la comodidad que ofrecen. Hoy en día siempre llevas el móvil contigo, sea porque la pantalla del móvil causa lo que yo llamo «efecto fuego». Es como cuando te sientas delante de una pequeña hoguera y que no consigues quitarle los ojos de encima. Te captura, te engancha y te hace pensar; probablemente porque los ojos son sensible a la luz y a los colores que desprenden luz y la pantalla del móvil está hecha de colores luminosos y muy nítidos, tal vez es por eso que los últimos modelos de pantallas televisivas intentan ser cada vez más intensos en el color, en la nitidez y en la luminosidad, para atraer a la gente para que los compra. También es necesario conocer un poco de psicología para entender el funcionamiento de los mecanismos humanos y usarlos para el bien de los demás, sin aprovecharse.
MaX: Hay que ponerse en la piel de una persona que quiere cambiar rumbo para mejorar su vida acercándose a Cristo.
Luego hay que curar bastante la parte grafica porqué vivimos en un mundo de imágenes y por lo tanto también nos acercaremos a las personas de esta forma. Nuestras apps, tienen un aspecto que resulta atractivo porqué hemos intentado unir lo antiguo con el moderno, ambas partes pueden armonizarse. Lo antiguo es bonito porque transmite un mensaje de calor, de riqueza sentimental, de belleza y de movimiento; lo moderno (pienso en el minimalismo) es más práctico y transmite un mensaje de sencillez, orden de las cosas y claridad. Ambas partes se enriquecen, una con la otra, como la unión entre un hombre y una mujer.
Lo que sí es importante es atender a las funcionalidades que la gente busca, conservando la idea de Iglesia que la gente tiene en su cabeza. Para entenderlo les aconsejamos de instalar en sus móviles «El Santo Rosario Perpetuo» presente en PlayStore. Nos encuentran en la web como mRobot.eu