El corresponsal de ABC en el Vaticano Juan Vicente Boo asegura que Francisco «habla el lenguaje de las personas corrientes»
(lasprovincias.es).- ‘El Papa de la alegría’ es el título del libro que acaba de publicar el periodista Juan Vicente Boo, corresponsal de ABC en el Vaticano, en torno a la figura de Francisco, un Pontífice que «sin tabletas ni móvil es la persona con mayor reputación en internet». La obra ofrece un atractivo recorrido por las palabras y hechos que describen la figura y trayectoria del «reformador».
Leer en la cubierta del libro la palabra alegría unida a Papa invita a la lectura. Pero ¿por qué ese título? Varias razones expone el autor en su conversación con LAS PROVINCIAS como respuesta al interrogante. La primera, la sorpresa que causó «la alegría que el Papa irradia y por el modo en que nos invita a transmitir alegría a los demás, porque el Evangelio es buena noticia».
Pero Juan Vicente Boo vio algo más. A medida que observaba los pasos de Francisco descubrió que ese sentimiento humano «era el hilo conductor de su mensaje». Y aún encontró un tercer punto de apoyo. Con el tiempo se dio cuenta de que el Papa «había convertido la alegría en una poderosa palanca virtual con la que obtenía resultados antes inalcanzables».
Aclaradas las razones del título publicado por Espasa, se impone hablar del contenido -no menos atractivo- de la obra que firma un periodista con larga experiencia y profundo conocimiento del día a día del Vaticano. Una introducción abre el camino que luego discurre por asuntos abordados a partir de pronunciamientos o acciones de ese Papa que, a juicio del periodista, ha «vuelto a las raíces y ha dado un salto al espíritu de los primeros momentos del cristiansmo, cuando la alegría y el amor eran máximos».
El primer capítulo se detiene en la sonrisa de Francisco. Avanzar en la lectura permite un reencuentro con aquella visita a Lampedusa que sorprendió al mundo o la que realizó a un campo de refugiados palestinos en Belén. Descubren también las páginas de Boo respuestas a interrogantes como qué piensa Francisco de las mujeres. Analiza los pronunciamientos sobre la familia. La atención a los jóvenes a los que el Pontífice encomendó la tarea de «armar lío» y los mayores, bajo «la bendición de la larga vida», contribuyen a enganchar al lector de ‘El Papa de la alegría’.
La calificación de «monstruosidad» que Francisco ofreció al abuso de menores, «Economía real… ¡Y trabajo honrado!», «Ecología: la mirada divina» y «Cristianos y musulmanes somos hermanos» llenan otros capítulos que bajo la minuciosa mirada de un experto como Boo descubren a ese Papa que «vuelve al ‘big bang’ inicial del cristianismo», pero al mismo tiempo «es un Papa del futuro». «Nos ha dicho muchas veces que no vivimos una era de cambios, sino un cambio de era», argumenta.
El periodista que lleva 18 años siguiendo los pasos de los papas insiste en que quien hoy ocupa la silla de Pedro, «aun siendo mayor, tiene la cabeza y la mirada en el futuro, y lo comprende». Buena prueba de ello se descubre en la manera de comunicar que ha conquistado, de hacer llegar su mensaje a cualquier rincón; una muestra más del cambio que va unido a su figura y a la creencia generalizada de su actitud reformadora.
Dice Juan Vicente Boo que es «el mejor comunicador del planeta». Varias claves explican esta consideración. «Comunica como el Evangelio, con gestos, pequeñas parábolas y con tuits. El Evangelio es absolutamente tuiteable», dice. Además, «escucha muchísimo a personas corrientes y por eso habla su lenguaje». Pero, sobre todo, «predica con el ejemplo».
La lectura de ‘El Papa de la alegría’ ayuda a encontrarse con muchos detalles que permiten conocer a un Pontífice que ha asombrado al mundo