(aciprensa.com).-Sekuereme es el nombre de la nueva aplicación móvil que brinda apoyo integral, online y presencial, a quienes padecen tanto en la mente como en el alma.
Gracias a esta herramienta, cualquiera que lo desee podrá contar con la ayuda de un sacerdote (apoyo espiritual), de un profesional del ámbito de la psicología, el derecho, psiquiatras, enfermeros, etc (apoyo profesional) o simplemente con el hombro y consuelo de una persona que haya pasado por su misma situación (apoyo humano).
Un mes después de su lanzamiento, ya está presente en 73 países de todo el mundo, en 750 ciudades y en los 5 continentes y se han atendido a más de 30.000 personas de todo el mundo.
El origen de Sekuereme
El responsable de la plataforma, el español Javier Pacheco, explicó a ACI Prensa que esta aplicación es el resultado “de más de tres años rezando a través de Instagram todos los domingos a las 21:30 horas”, lo que denominaron como las “Macrofiestas del Rosario”.
“Podríamos decir que Javi nos ha traído hasta aquí. Él era un niño de 8 años con antecedentes de Síndrome de Down, que padecía Leucemia. En sus últimos días de vida, quisimos rezar un Rosario con la finalidad de allanar su camino al cielo y acompañar a su familia”, señaló a continuación.
Fue entonces cuando,“confiando en el poder de la oración”, se puso en contacto con el P. Josep Maria Quintana “y decidimos iniciar un rosario en directo por Instagram, para que todo aquel que quisiera rezar por Javi y su familia se pudiera unir”.
“Al ver la repercusión positiva que había generado, nos pusimos en contacto con Clara y Laura, que sin pensarlo nos dijeron que sí. Y así nació la Macrofiesta del Rosario, hace poco más de tres años”, explicó.
Las “Macrofiestas” del Rosario
A raíz de estos encuentros digitales, se fue creando una familia, “donde nos han solicitado a lo largo de estos años apoyo de todo tipo”, destacó.
Desde 2021, los responsables de este proyecto —el sacerdote P. Josep Maria Quintana (@quintanajosepmaria); la abogada Clara López de Lemus (@lavirgendelaalegria) y Javier Pacheco (@pacheco.doria)— ponen a disposición sus cuentas de esta red social para unirse en oración.
En cada Rosario, cerca de 20.000 personas se conectan en directo durante la oración, manteniendo una cifra constante entre 1.000 y 1.500 personas aproximadamente rezando al unísono. “Además, se han realizado Macrofiestas del Rosario presenciales en diferentes ciudades de España”, añadió Pacheco.
¿Qué significa Sekuereme?
Pacheco, quien se considera un “apasionado de ayudar a las personas”, explicó a ACI Prensa que el nombre de esta iniciativa significa “sígueme”, tal y como le dijo Jesús a Mateo “y lo repitió en varias ocasiones a sus discípulos”.
“Y nos lo dice cada día a nosotros esperándonos para sanar todas nuestras heridas, con el fin de que encontremos en Él el sentido a todo lo que nos toca vivir”, remarcó.
Asimismo afirmó que, aunque “de cien personas nos importan las cien, independientemente de las circunstancias de cada persona”, la gran mayoría de personas tienen el corazón roto, sufren mucho”.
“No saben dónde acudir, y gracias a la confianza generada a lo largo de tantos Rosarios en familia, nos escriben para pedirnos casi siempre ayuda psicológica y ayuda espiritual”.
En concreto, indicó que han derivado a más de 3.000 personas a sacerdotes de todo el mundo, a cientos de personas a diferentes profesionales, “y otros cientos se han puesto en contacto con personas que han vivido una situación parecida a la que nos explican y por la cual nos solicitan ayuda, y las hemos derivado para que humanamente también puedan ser escuchadas, atendidas y acompañadas”, resaltó.
“En esta sociedad vacía de contenido de valor ya estaba generada, solo debíamos y debemos tener una plataforma que funcione a la perfección para dar respuesta a tanta necesidad. El primer día fuimos la aplicación en estilo de vida más descargada a nivel nacional y se solicitaron en las primeras 24 horas más de 500 solicitudes de apoyo”, señaló.
¿Cuáles son los problemas más comunes?
El también consultor de comunicación indicó que el principal problema de la sociedad actual es “la pérdida de valores”.
“Por desgracia, vivimos en un mundo donde existen muchos influencers de imagen y pocos referentes con un contenido que aporte valor”.
Lamentó asimismo que vivimos en una sociedad “débil y muy dividida”, en gran parte “por las ideologías revestidas de buenismo y de derechos que atentan contra el sentido común y, por desgracia, contra la vida humana”.
Además, señaló que “todo lo que suponga a día de hoy una cultura del esfuerzo y de la negación, es considerada y catalogada como retrógrada. A veces, aprender a decir ‘no’, elegir el deber en lugar del querer, te construye como persona”.
“No todo lo que nos apetece lo debemos hacer, por nuestro bien y por el bien de los demás. Nosotros siempre decimos que un avance sin valores es un retroceso sin control, y es lo que estamos viviendo”, afirmó.
La ayuda espiritual y humana que brindan sacerdotes y voluntarios
Los sacerdotes disponibles en la aplicación llegaron hasta ella gracias a la ayuda del P. Josep María Quintana y al “boca a boca”.
Si un sacerdote desea formar parte de este proyecto, deberá descargarse la aplicación, registrarse como apoyo espiritual y esperar a que alguien solicite apoyo.
La finalidad del proyecto, continuó Pacheco, es derivar de lo digital a lo presencial, “pero en el caso de no contar con apoyos presenciales cercanos, la plataforma te muestra un apoyo online para que siempre tengas una persona a la que acudir y no una búsqueda vacía de apoyo”.
Además de la figura de los diferentes apoyos, está la figura del voluntario, personas “cercanas a la zona que nos ayuden a encontrar el apoyo que necesita esa persona”, explicó.
Las peticiones a la Virgen de la Alegría
A través de la aplicación los usuarios también pueden dejar por escrito sus peticiones, las cuales son “recibidas por el equipo de la Macrofiesta y puestas encima del altar cada mañana cuando el P. Josep Maria celebra la Santa Misa”.
Historias de conversión “apasionantes”
“Desde el primer momento nos llegan historias de conversión apasionantes, que, gracias a ellas y a nuestros intercesores, recibimos la fuerza necesaria para seguir navegando muchas veces a contracorriente”, resaltó.
De estas historias, Javier destacó algunos matrimonios “que estaban a punto de divorciarse con los papeles prácticamente tramitados y que, tras rezar en familia, han logrado conciliarse; mujeres embarazadas con dudas sobre si seguir adelante con su embarazo y que a día de hoy son madres ejemplares (mandándonos las ecografías durante los meses de embarazo); o personas que han querido recibir algún sacramento”.
Además, señaló que actualmente reciben la ayuda de muchas personas anónimas, “que rezan todos los domingos con nosotros, que sin ellas, todo esto sería casi imposible”.
“Nos piden ayuda todo tipo de personas. Y sí, conversiones hay todos los días y de todas las circunstancias, pero muchas de ellas son de personas que habían abandonado la fe y que se han vuelto a encontrar con el Señor. Nosotros gracias a la oración hemos sido testigos en primera persona de esa reconversión”, puntualizó.