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WhatsApp Comunidad y parroquias: un nuevo tablón de anuncios

(weca.it/).-Si estás viendo este tutorial, es muy probable que estés suscrito a uno o más grupos de WhatsApp relacionados con parroquias, asociaciones e instituciones religiosas. Una herramienta útil, por supuesto, pero que a veces puede resultar dispersa, tanto que el «pánico del grupo de Whatsapp» se ha convertido en un eslogan en el debate público.

En los últimos meses ha llegado una nueva función, disponible por el momento solo para algunos dispositivos, que hará que WhatsApp sea menos caótico y «retumbante».

Estamos hablando de WhatsApp Community. ¿De qué se trata?

La comunidad de WhatsApp es la posibilidad, dentro de WhatsApp, de agregar usuarios individuales y todos los componentes de los grupos existentes dentro de un solo tablero donde todos pueden leer, pero solo los administradores pueden escribir.

Entonces, ¿cuáles son las ventajas?

Como explica el amigo de WeCa, Don Giovanni Benvenuto, que ya ha experimentado con la herramienta dentro de su parroquia añadiendo los diferentes grupos parroquiales a una comunidad, «cuando tienes que enviar un mensaje a todos los feligreses, no lo envías a los diferentes grupos, sino a la comunidad que los reúne a todos». De esta manera, aquellos que están suscritos a varios grupos no recibirán el mismo mensaje varias veces. Además, dado que el grupo es unidireccional, el mensaje no se perderá en un goteo de comentarios de los participantes.

Otra función importante es la privacidad: los usuarios simples verán el número total de miembros de la comunidad, pero no podrán obtener contactos, mientras que en los grupos canónicos de WhatSapp cualquiera puede leer los números de teléfono de todos los demás componentes.

Para ampliar la comunidad, los administradores pueden agregar grupos enteros o pueden invitar a usuarios individuales con un vínculo abierto. Como explica Don Giovanni Benvenuto, se puede imprimir un código QR en un folleto de papel para entregar a los feligreses o colgar en la parte trasera de la iglesia, invitando a todos a suscribirse al tablón de anuncios digital de la parroquia para mantenerse informados sobre las últimas iniciativas.

El análisis de una herramienta como WhatsApp Community, sin embargo, nos recuerda uno de los mayores riesgos de las alertas parroquiales. De hecho, no todo el mundo está interesado en todas las alertas. Las advertencias «secas», de propósito, corren el riesgo de aburrir a aquellos que no se sienten cuestionados. Por esta razón, siempre es útil acompañar los avisos con una oración, un poco de profundización, una imagen o un video que sea hermoso de ver. Como explica el P. Giovanni Benvenuto, es importante que «nadie diga nunca ‘esto no era para mí'», sino que reconozca, aunque sea tangencialmente, un valor de utilidad y enriquecimiento. La lógica, por tanto, es más parecida a la de una página de Facebook que a la de un antiguo grupo de Whatsapp.

Por último, dentro de las comunidades, en el campo «descripción», se pueden promocionar otros grupos internos. Está claro, no permitiremos que nadie entre en el grupo privado de WhatsApp de catequistas o animadores, pero podríamos proponer grupos temáticos, tal vez dedicados al Evangelio o al Santo del Día. Con un simple mensaje podemos invitar a cualquier persona a suscribirse.

En esencia, se trata de encontrar formas más educadas y «ordenadas» de vivir como parroquia un instrumento que necesariamente – por razones profesionales y personales – todos nosotros ya vivimos.

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