SINOPSIS

Se trata de un ensayo sobre la intersección entre cine y teatro. Así se plantea la filmación de un ensayo general de la obra sin escenario y atrezzo. Únicamente los intérpretes dentro del pequeño especio escénico.

La obra es un drama sobre el tiempo perdido, las opciones infelices y los amores imposibles. Sin embargo el asombroso diálogo final plantea un hondo sentido de fe que Louis Malle nos ha querido dejar como su última película.

El tío Vania ha estado a punto de suicidarse con morfina que le ha quitado al médico, pero será su sobrina quien le convenza. Sonia es la imagen "de una muchacha buena, pura e inteligente" (dirá su madrastra). En la escena son interesantes los primeros planos, la intimidad que permite el cine y a la que no llega el teatro. El plano-contraplano también está realizado con gran belleza. La interpretación con la elocuencia de la sencillez es magistral.

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